Tras el confinamiento obligado en casa desde hace 18
días, hoy me dispongo a entretenerme y,
si es posible, entretener a aquellos curiosos que entran a nuestro blog.
No voy a hablar, de momento, de las restauraciones
que hacemos; voy a darle un repasito a esos chismes que de alguna manera han
ido llegando a mi casa y a los que les tengo un gran cariño. Muchos de ellos
serán parecidos o iguales a vuestros chismecicos queridos, os invito a ir
descubriendolos.
Y hoy tocan:
Los pisapapeles de cristal.
Seis tengo, dos de ellos regalos de juventud, los
otros cuatro heredados.
Como veis el motivo fundamental son las flores y
suelen ser pequeñas obras de arte en vidrio, especialmente los antiguos.
Los conocemos como pisapapeles, pero los que saben
de esto les llaman “pesas” o “pesos” pues ese era su fin cuando fueron creados.
A mediados del siglo XIX el uso de papel se generalizó, por otra parte las casas se tenían que ventilar
abriendo ventanas y el papel apilado en las mesas de despacho o gabinetes
volaba al menor descuido, que mejor forma de sujetarlo que con estas delicadas
piezas, por otra parte símbolo del estatus de su propietario.
Parece ser
que su invento se debe al vidriero veneciano Pietro Bigaglia, que en la
exposición industrial de Viena de 1845 expuso varios pisapapeles de cristal de los
denominados millefiori, una técnica
que juntaba docenas de barras de cristal coloridas dentro de una bóveda del
vidrio claro. Pero quienes después se alzaron con la producción más deseada y
exclusiva fueron los vidrieros franceses, Bacarat y St. Louis, destacando los
de Clichy, cuyos modelos son hoy en día los más valorados.
Aunque su valor
no es especialmente alto, no suelen superar los 100€, exceptuando las piezas
antiguas raras, muy buscadas por los coleccionistas, su valor estético hace de
estas pequeñas piezas una colección deliciosa y que ocupa poco en los escasos
metros de nuestras viviendas actuales.
Magnífico post
ResponderEliminarEscarcha de confeti,
ResponderEliminaratrapada por una gota de rocío,
congelada en un amanecer de abril.